Hay que reconocer la labor de las y los trabajadores públicos que, pese al gobierno andaluz que tenemos, dan lo mejor de sí para garantizar la prestación de los servicios públicos de nuestra Comunidad.
Y hay que recordar a la Junta el escándalo de los procesos de las contrataciones exprés, la Bolsa Única Común que creó y que no ha servido para nada, y la necesidad de que la futura Ley de Función Pública venga a resolver el abuso de temporalidad.
Se hace urgente acabar con este abuso de la temporalidad y esta Ley podría ser un buen instrumento para solventar la situación de las y los funcionarios interinos y del personal temporal de la administración andaluza. Porque hay que dar estabilidad y fijeza a las y los trabajadores.