El blog de Ismael Sánchez, donde informarte sobre su actividad y declaraciones

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Por qué el PP miente constantemente: una reflexión necesaria

14 Nov, 2025 | Noticias, Reflexiones

Quienes asistimos cada mes al Pleno del Ayuntamiento de Sevilla —y quienes trabajamos cada día en sus comisiones, en sus expedientes y en el contacto directo con la ciudadanía— sabemos bien lo que significa convivir con un gobierno que ha hecho de la mentira un método y del bulo una herramienta política. No es un accidente, no es un exceso ocasional de retórica parlamentaria: es una forma de gobernar.

El PP en Sevilla se ha instalado en la lógica del “todo vale”. Da igual que los datos contradigan sus discursos, da igual que los informes técnicos digan lo contrario de lo que proclaman, da igual que la ciudad esté viviendo problemas graves que requieren rigor y soluciones. Su prioridad no es la verdad, ni el servicio público, ni el compromiso con una Sevilla más justa. Su prioridad es mantener el poder, preservar su estatus, blindar sus intereses y desviar la atención cuando la realidad les incomoda.

A veces, al escucharles, una sensación recorre el salón de plenos: hablan como los viejos caciques. Como aquellos cortijeros que se creían dueños de todo, superiores al resto, autorizados para imponer su palabra aunque esta chocara con la evidencia. Un estilo político que parecía enterrado, pero que regresa con otros trajes, otras siglas y los mismos tics autoritarios.

Porque para ellos, mentir no es un problema: es un recurso. El objetivo no es explicar la ciudad, sino manipularla. No es debatir, sino atropellar. No es escuchar, sino imponer. Por eso fabrican bulos, caricaturizan a la oposición, rehúyen cualquier mecanismo de transparencia y utilizan la institución como si fuera su cortijo particular.

Pero la historia de esta ciudad —y de tantas otras— demuestra algo fundamental: cuando el poder se aleja del pueblo, el pueblo despierta. Y Sevilla está despertando. Lo vemos en los barrios que exigen servicios dignos, en los colectivos que reclaman sus derechos, en las asociaciones que no se dejan amedrentar, en quienes no aceptan que las mentiras se conviertan en normalidad.

Nosotras y nosotros, desde Izquierda Unida, estamos ahí: acompañando, organizando, defendiendo, señalando los abusos y desmontando cada falsedad. Porque la política municipal no puede convertirse en un teatro donde la mentira gobierna. La política municipal debe ser el espacio de la verdad cotidiana: la limpieza viaria, la familia que necesita acceder a una vivienda, la del centro de salud saturado, la de la biblioteca cerrada por falta de personal, la de la familia que espera una ayuda que nunca llega, los colegios sin mantenimiento ni limpieza, la de los barrios que resisten, la del acceso al empleo…

La derecha miente porque teme a un pueblo consciente. Miente porque no tiene proyecto para la mayoría social. Miente porque sabe que, cuando la ciudad se organiza, pierden su cortijo.

Y esa es exactamente la tarea de nuestro tiempo: seguir despertando, seguir organizándonos, seguir luchando y defendiendo lo común. Porque frente a su mentira interesada, está la verdad de la gente. Y esa verdad, cuando se mueve, cambia ciudades.