Hoy hemos conocido los datos del paro de la Encuesta de Población Activa (EPA) correspondientes al primer trimestre de 2021.
Entre enero y marzo de este año nuestra provincia contabiliza 11.600 parados más, siendo la población desempleada de 219.600 personas, por lo que es urgente diseñar ya medidas que vengan a contrarrestar estas demoledoras cifras.
Sevilla es la segunda provincia de España donde más sube el paro, hasta casi el 24%, lo que supone casi 1,4 puntos más que en el cierre de 2020 y tres más que hace un año.
En concreto la tasa de paro en la provincia se sitúa en 23,8 por ciento, casi ocho puntos superior a la media nacional.
La desindustrialización que sufrimos en Andalucía y en nuestra provincia, además se traduce en empleo precario, temporal e inestable.
Por ello seguimos exigiendo medidas contundentes para propiciar la creación de empleo de mayor calidad, porque tenemos condiciones suficientes para afrontar un cambio de modelo productivo, con la apuesta por una industria vinculada a los sectores de energías renovables y a toda la cadena de valor de los productos agrícolas.
La EPA refleja claramente la destrucción de empleo en la provincia, con 16.100 menos que en el cuarto trimestre de 2020, afortunadamente, la extensión de los ERTE de forma consensuada entre Gobierno y agentes sociales ha conseguido evitar que la cifra de parados sean aún mayor.
Desde nuestro grupo parlamentario hemos planteado a la Junta de Andalucía actuaciones concretas, hemos propuesto un Plan de Empleo desde la administración andaluza, para los ayuntamientos que crearía más de 11.500 puestos de trabajo en la provincia de Sevilla, y del que no hemos tenido respuestas por parte del gobierno andaluz
la Junta podría establecer estas medidas que son muy necesarias, ya que cuenta con los recursos económicos para ello, recordamos que el gobierno andaluz presume de tener superávit en los bancos, mientras las y los sevillanos sufren las consecuencias de no encontrar un puesto de trabajo.