No existe una política forestal en Andalucía
La lucha contra el cambio climático, la desertificación y la protección de nuestro patrimonio forestal no está en la agenda de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible y tenemos un ejemplo en la convocatoria de ayudas forestales al monte privado que no le afeamos nosotros, sino una organización como Asaja, que dice que “la pésima gestión de las ayudas forestales supone el mayor fracaso medioambiental del gobierno de Moreno Bonilla, que deja sin invertir el 50% de los fondos presupuestados, el monte se deja a expensas de las llamas el próximo verano”.
Es necesario poner en valor el Pan Forestal Andaluz, un plan brillante con una proyección a 60 años, consensuado, participativo y con total vigencia.
Las consecuencias de no aplicarlo son los incendios, baja capacidad de absorción de CO2, la seca de alcornoques y encinas, erosión de suelos, caída de la biodiversidad, desertificación y mala recarga de los acuíferos. Además, hay que recordar que el último año más de 14 comarcas en Andalucía entraron en sequia severa.